Los humildes pobladores de San Martín que utilizan la Carretera Fernando Belaunde Terry para trasladarse a sus viviendas y centros de labranza y de trabajo en la ciudad de Tarapoto, tienen que cruzar el rió Cumbaza, exponiendo perder la vida, debido a que los nativos huelguistas que bloquearon la vía, impiden que indefensas mujeres niños y ancianos lo hagan por el puente Cumbaza.
Estos abusos y vejaciones ocurren ante la mirada indiferente de los miembros de la policía nacional que no hace sentir su presencia.
Por otro lado los fiscales no han denunciado hasta el momento a ningún dirigente o responsable de este abuso considerado por la ley como acto terrorista, debido a que el Gobierno del Presidente Alan García lo esta manejando políticamente y no ha intervenido hasta hoy ni para negociar y menos para hacer prevalecer la Ley.
Mientras tanto la ciudad de Tarapoto padece hambre y sed, y el combustible esta agotándose, los alimento escasea y han subido de precio ante la mirada disimulada de las autoridades nancionales.
El Alcalde Sandro Rivero trató de convencer a los dirigentes nativos para dar una tregua a los transportistas que traen alimentos de primera necesidad y sin embargo nada ha conseguido hasta hoy, luego de ocho días de intransigencia y de apropiacion absoluta de la vía nacional interoceánica que mantiene incomunicado a la Región San Martín, Amazonas y Loreto.
Ya corre la voz en el sentido que los pobladores humildes marcharían para enfrentarse contra los huelguistas y desalojarlo si es que la autoridad y la policía no cumple con su deber; lo que estaría originando consecuencias peligrosas difícil de presagiar.
Estos abusos y vejaciones ocurren ante la mirada indiferente de los miembros de la policía nacional que no hace sentir su presencia.
Por otro lado los fiscales no han denunciado hasta el momento a ningún dirigente o responsable de este abuso considerado por la ley como acto terrorista, debido a que el Gobierno del Presidente Alan García lo esta manejando políticamente y no ha intervenido hasta hoy ni para negociar y menos para hacer prevalecer la Ley.
Mientras tanto la ciudad de Tarapoto padece hambre y sed, y el combustible esta agotándose, los alimento escasea y han subido de precio ante la mirada disimulada de las autoridades nancionales.
El Alcalde Sandro Rivero trató de convencer a los dirigentes nativos para dar una tregua a los transportistas que traen alimentos de primera necesidad y sin embargo nada ha conseguido hasta hoy, luego de ocho días de intransigencia y de apropiacion absoluta de la vía nacional interoceánica que mantiene incomunicado a la Región San Martín, Amazonas y Loreto.
Ya corre la voz en el sentido que los pobladores humildes marcharían para enfrentarse contra los huelguistas y desalojarlo si es que la autoridad y la policía no cumple con su deber; lo que estaría originando consecuencias peligrosas difícil de presagiar.
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